Durango

Desde tiempos prehispánicos, el territorio hoy ocupado por el estado mexicano de Durango se ha distinguido por una identidad fronteriza que en la conciencia popular está altamente asociada con la imagen del Viejo Oeste. No sólo Durango es el estado de nacimiento del revolucionario Pancho Villa, sino que también durante la Revolución fue uno de los escenarios principales de enfrentamientos armados entre campesinos y las fuerzas gubernamentales que habían promovido políticas que tendían a favorecer a terratenientes extranjeros. Durango fue también punto importante durante la Guerra Cristera, en que de nuevo la voz de los campesinos exigía el respeto del gobierno federal a su forma de vida y sus derechos.

Una característica importante de la cultura e historia duranguense es el hecho de que, a diferencia de lo que sucedió con otros estados vecinos, en su territorio las principales comunidades indígenas no fueron hablantes del náhuatl, que era la lengua del imperio azteca, sino de lenguas como el tepehuano del sur, el huichol y el cora. Hoy en día, incluso, el 84.7% de los hablantes de tres años o más de alguna lengua indígena en Durango son hablantes de tepehuano del sur.

Como es propio de un estado con un patrimonio tan marcado de lucha social por los derechos agrarios de los campesinos, hoy en día la principal actividad económica en Durango es el comercio de su producción agrícola. Asimismo, a pesar de tener una extensión que representa el 6.3% del total del territorio del país, Durango es uno de los estados con menor densidad de población, ya que alberga solamente al 1.5% de los habitantes de todo México. Ligado al hecho de que el 28% de la población duranguense habita en zonas rurales aisladas, donde el acceso a servicios de salud y educación tiende a ser dificultoso por los tiempos de traslado de las casas de los pobladores a instalaciones médicas y escuelas, el grado de escolaridad promedio en Durango es de 9.7 años de estudio, lo que significa que, en promedio, los estudiantes duranguenses suelen dejar de ir a la escuela poco antes de completar el primer año de educación preparatoria, muchas veces debido a los gastos (uniforme, transporte, útiles escolares) que representa para las familias el que los alumnos asistan presencialmente a centros educativos retirados.

De acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), un solo año adicional en el grado de escolaridad de un país puede incrementar el producto interno bruto per cápita (también llamado PIB per cápita, que es el promedio del valor monetario de todos los bienes y servicios generados a lo largo de un año) de un país entre 4 y 7%. Con este dato es que se vuelve evidente la relación que existe entre el grado de escolaridad de Durango con el estado de las finanzas de sus habitantes. El PIB per cápita en Durango es de $101,500 pesos, casi $26,000 pesos por debajo del promedio nacional de $127,425.

Al considerar que Durango es uno de los estados con menos población por metro cuadrado, que la principal actividad económica de sus habitantes es la agricultura y que uno de los factores claves para tener un ingreso anual por habitante por debajo del promedio nacional es su nivel educativo, es clara la necesidad de invertir en la educación como una estrategia clave para mejorar las condiciones de vida de los duranguenses. Esta noción es el impulso de la UNIDEV para ofrecer a sus estudiantes un modelo educativo cómodo con el cual se puede acceder a su programa de estudios completo desde cualquier punto del país sin necesidad de gastar en uniformes, transporte o comida fuera de casa, sólo contando con un celular conectado a internet.

En el Durango, como en toda la República, la UNIDEV refrenda su compromiso para con sus estudiantes innovando la educación en México.